La vivencia que queda en mi como recuerdo ha día de hoy de este método, lo describiría como el acercamiento a nuestra fuerza y potencial real y consciente, hubo muchos duelos que afrontar, el acercamiento a mis entrañas mas dolorosas de aceptar, el reencuentro conmigo misma, con mis emociones reales, acercarme al amor máximo y al miedo extremo, la claridad de sentir todo absolutamente todo lo que me rodeaba y formaba parte de mi ser. Y el sentir de mi cuerpo, incluso con mi parte animal que fue el todo cuando conseguí entender mi propio camino en el silencio y la sencillez del estar presente. El método para mi fue el primer peldaño de mi camino hacia mi interior, una herramienta para entender con amor y valentía el mar de emociones y energías que me rodeaban en aquel entonces, ha día de hoy recuerdo con amargor y dulzor las emociones de desnudar las historias de la gente y acompañarles en su camino, aportándoles parte de mi claridad. Diría que es un gran apoyo a muchos niveles, un pequeño impulso para tomar tu camino desde tu individualizar consciente con amor y respeto. Este es, a día de hoy parte de mi recuerdo Elisa.